Mi corazón está inquieto hasta que descanse en Ti (San Augustin)
Nací en el seno de una familia de emigrantes Españoles de profundos valores cristianos. A través de mis padres recibí la fe y fue donde por primera vez escuché hablar de Jesús y me enseñaron las primeras oraciones. Todo hacia pensar que tenía una profunda fe cristiana; la realidad era otra. 
Cuando llegaron por primera vez nuestras hermanas de Italia en la parroquia que yo frecuentaba me hicieron entender que todo esto era bueno pero no era todo. Cuando las hermanas comenzaron a misionar en distintas provincias de Argentina ahí comenzó un gran deseo en mi corazón de amar profundamente a Dios y que ese amor me llevase a estar con.El en todo momento y hacer todo por amor. 
Me animaron a presentarme ante El tal cual era con mi gran mochila de virtudes y miserias.Desde el punto de vista humano lo tenia todo familia amigos mi hermoso empleo y mi auto .pero Jesús poco a poco siempre con delicadeza y sin imponer nada ocupando mi.corazón por entero me iba atrayendo cada vez más a hacia El. 
Han sido años de gran lucha y resistencia pues una vida completamente entregada exige mucha renuncia a todos los niveles si embargo como dice San Agustín: mi corazón está inquieto hasta que descanse en Ti) En mi vocación de Hijas del.Oratorio descubrir para que me había pensado Jesús desde la eternidad ser su esposa. No puedo terminar sin dar gracias a Dios por el grandísimo regalo de mi vocación como Hija del Oratorio.
Hna Victoria
